Cuando ya había hecho su lista mental de regalos, caminó
hasta la pequeña cafetería y pidió su chocolate caliente. Salió sin prisa del
establecimiento, y comenzó a subir la calle del río. Se fijaba en cada detalle
de lo que había a su alrededor. Veía a la gente andar apresurada, con prisa,
sin pararse a observar lo que les rodeaba, otros sin embargo se sentaban en
bancos y miraban ausentes al horizonte, también estaban los que ya habían
comenzado a tocar sus guitarras esperando algún donativo por ello. Raquel era
así, se fijaba en todo, le gustaba contemplar el mundo.
Por fin llegó a la plaza y se sentó, acurrucándose en su
banco favorito, desde él se veía toda la ciudad. Era como si volara sobre ella.
Podía ver la sierra, el río, los barrios antiguos. Le gustaba evadirse
contemplando aquella escena. Pero de repente una voz la sacó de su
ensimismamiento.
-Tan madrugadora como siempre. Espero que haya chocolate
para mí.
No podía creérselo, era él. Por fin había vuelto.
-Me parezco a ti en lo de madrugadora, y bueno, haré el
esfuerzo por compartir mi chocolate contigo- se levantó del banco y corrió a
abrazarlo.
-Veo que me has echado de menos Raquel- él la levantó del
suelo, dando una vuelta sobre sí mismo.
-Pues claro que te he echado de menos, estaría loca si no lo
hiciera.
-Pero es que tú, siempre has estado loca- esbozó esa media
sonrisa que a ella tanto le gustaba.
-Entonces creo que en ese aspecto también me parezco un poco
a ti.
Ahí fue donde de verdad comenzó su bonito invierno.
(Aquí tenéis la segunda parte del relato, espero que os guste >.< Y ya como esta es la última entrada del año, espero que paséis una Nochevieja maravillosa y que disfrutéis mucho. ¡Feliz 2012! Un beso enorme para esas 409 personitas que me siguen)
Bonito final :)
ResponderEliminarFeliz año para ti también
Un beso
Los reencuentros de navidad siempre son tan especiales..!
ResponderEliminarUn beso enorme bonita :)
Bonito :) Y con foto de Siempre el mismo día incluida.
ResponderEliminar¡Besos!
Me ha encantado el relato (ambos).
ResponderEliminarEmpezar 2012 con la dulzura de tu chocolate, y tus palabras, sin duda es todo un placer ^.^
Un beso y feliz año Laura :)
Feliz año para ti tambien! preciosa la entrada un besito:)
ResponderEliminarPrecioso (L)
ResponderEliminarPues... en el amor siempre hay locura, así que seguro que tienen razón y están los dos un poco majaretas :)
Un beso
Un final perfecto *-*
ResponderEliminarQue de Raqueles enamoradas hay hoy por blogger, y que bien redactadas están (de hecho, a las mil maravillas).
ResponderEliminarMuy bonito relato y la historia de amor, im-pre-sio-nan-te.
Besos de purpurina, Alicia.
Son 410, porque yo te sigo y creo que no estoy en la lista :P
ResponderEliminarEn fin, no puedo repetirme más, ya no me quedan adjetivos dulces para describir tus textos.
Besazos eternos, vale? y muy muy muy muy feliz 2012
A mí también me están empezando a gustar los inviernos así :)
ResponderEliminarFeliz 2012 desde Noëlle's Coeur